La geodiversidad se define como la heterogeneidad de los geoelementos (geológicos, geomorfológicos, edáficos, etc.) en el espacio, al igual que la biodiversidad como variabilidad taxonómica de los seres vivos. Surge como campo de investigación hace relativamente pocos años, siendo común el empleo de sistemas de información geográfica (SIG) para la combinación de todos, o varios, componentes generales de la geodiversidad (litologías, estructuras, geoformas, suelos, topografía) en forma de capas. Hasta el momento, la mayoría de los estudios se han centrado en áreas montañosas y continentales, utilizando operaciones algebraicas basadas tan solo en el parámetro riqueza de la diversidad. En este trabajo se desarrolla una nueva perspectiva basada en tres ejes: i) el estudio de la diversidad (exclusivamente) geomorfológica, ii) en ambiente litoral (de elevada diversidad), donde no han aplicados estudios de este tipo, y iii) conforme a índices y cálculos de ecología matemática que permiten abordar análisis más complejos a partir de la combinación de parámetros de riqueza, equiabundancia y similaridad. Esta nueva perspectiva se ha aplicado en la costa de Gran Canaria (256 km), isla volcánica situada en la región central del archipiélago canario. El empleo de software SIG ha permitido la construcción de una base de datos espacial binaria que recoge la presencia [1] o ausencia [0] de 14 geoformas costeras a lo largo del litoral. Las geoformas son proyectadas sobre la línea de costa mediante procedimientos cartográficos para determinar su frecuencia absoluta y relativa respecto al perímetro insular. Con ello se calculan los índices de Riqueza (R), entropía de Shannon (H’) y entropía cuadrática de Rao (Q), tanto para el conjunto de la isla, como para cada tramo costero mediante el análisis de las asociaciones espaciales de geoformas.